Si bien tener una cerradura segura es importante, es más común que sean las propias llaves las que se vean comprometidas. Al igual que en el mundo de la criptografía, los sistemas no suelen romperse porque la cerradura sea defectuosa, sino por tener las llaves adecuadas.
Según especialistas de Cerrajeros Málaga, a quienes puedes contactar a través del siguiente enlace, las llaves de una cerradura específica pueden proporcionar tanta o más información como la cerradura en sí, en caso de ser manipulada.
Si bien revisar una cerradura manipulada es excelente para determinar el método de entrada, el examen de las llaves es doblemente excelente para la identificación de sospechosos. Permite, entre otras cosas, determinar si han realizado un duplicado no autorizado.
Identificando una llave duplicada
Algunos de nosotros podemos saber rápidamente cuando nos entregan llaves que no son las nuestras. Las llaves son artículos que usamos todos los días, y conocemos bien su aspecto y hasta el sonido específico de nuestro manojo de llaves particular.
Pero en muchas ocasiones se puede dificultar identificar si estamos ante nuestra llave original o un duplicado. ¿En qué se diferencia una copia a la llave original?
Las marcas de identificación
Los fabricantes de cerraduras están orgullosos de sus productos. Por lo general las llaves originales están llenas de señales y códigos que el fabricante imprime en ellas, tanto directas (literales) como indirectas (ocultas).
Entre las marcas directas está el nombre del fabricante de la cerradura y el modelo particular. Las marcas ocultas normalmente son códigos numéricos que el fabricante utiliza para identificar la máquina que hizo el corte de la llave, o el lote de fabricación.
Profesionales de Cerrajeros Badalona nos comentan que las llaves duplicadas a mano, o con equipos no autorizados, no suelen tener muchas de estas marcas. Esta puede ser una señal bastante clara de que estamos ante un duplicado.
Cuando los materiales hablan
Ciertos fabricantes usan aleaciones patentadas para aumentar la longevidad y la resistencia de sus llaves. Esto puede dotarlas de un color particular, o un sonido al caer al suelo o golpear superficies duras.
El material de recubrimiento de la llave, y la forma en que se aplica, es una señal muy clara para distinguir duplicados de originales. Las llaves originales de enchapan luego de cortadas, mientras que en los duplicados están vienen chapadas de fábrica y los cortes exponen el material base.
Si al mirar la zona de los cortes en la llave distingues la diferencia de color entre el chapado y el material base, esta es una señal de un duplicado (o también de una llave muy gastada). La zona cercana a la broma (la pieza que detiene la llave) sufre menos desgasto y es un lugar perfecto para notar la diferencia.
¿Cómo saber si han tratado de copiar mis llaves originales?
Es posible que al prestar las llaves por un tiempo te hagas esta pregunta. Los cerrajeros forenses son especialistas en encontrar las señales de duplicación reciente en una llave original, pero todo depende de la forma en que se obtenga el duplicado.
Cuando una llave se duplica con una máquina que usa un stylus, esta herramienta deja una marca distintiva en el costado de la llave. Esta se asemeja a una línea larga, recta y pulida que no puede confundirse con el desgaste normal.
Las llaves hechas a mano se identifican muy fácilmente, y su posesión casi siempre es algo sospechoso. Este proceso puede dejar marcas en la llave original en forma de rampas raspadas e irregulares que un cerrajero forense puede identificar con claridad.
Es posible que se intenten hacen moldes de las llaves, usando materiales suaves, que luego sirvan para obtener duplicados. Esto suele dejar residuos sobre la llave que un ojo entrenado y atento puede identificar.
Las llaves también pueden verse bajo varias fuentes de luz distintas para identificar cualquier residuo no visible a simple vista. Muchas sustancias que se usan para obtener moldes dejan restos que son muy visibles bajo luz ultravioleta.
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